La Niacinamida no es realmente un ingrediente nuevo en el mundo del skincare, pero hasta hace poco, se usaba más bien como un activo secundario que apoyaba las funciones de los ingredientes principales. Recientemente, y en la medida que se descubría sus bondades, se empezó a usar como principal. Y es que la Niacinamida se lleva bien con TODO: con otros activos, con los distintos tipos de piel y con cada preocupación que tenemos.
Primero… ¿Qué es la Niacinamida?
La Niacinamida es una forma de Vitamina B3, fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo. Es responsable de facilitar cientos de reacciones enzimáticas en todo el cuerpo, haciendo un poco de todo, desde convertir nutrientes en energía hasta mantener la función antioxidante celular. En resumen: un MUST para el cuerpo.
¿Cómo beneficia la Niacinamida a la piel?
La Niacinamida es realmente multifacética: ayuda a la producción de proteínas en
la piel, fortalece la barrera de la piel, mejora el tono y la textura de la piel, calma la inflamación, minimiza la apariencia de los poros e incluso controla la producción de aceite. Y como ha estado presente hace mucho tiempo en distintas formulaciones, hay una enorme cantidad de estudios clínicos que comprueban sus beneficios y respaldan su eficacia.
Primero, actúa como un potente antioxidante, neutralizando los radicales libres que de otro modo dañarían el colágeno y el ADN celular. La Niacinamida también mejora la función de la barrera cutánea al aumentar la producción de ceramidas y, al hacerlo, puede reducir el enrojecimiento, la irritación y otras formas de inflamación.
La investigación también muestra que la Niacinamida puede mejorar la apariencia de las líneas y arrugas al estimular la producción de colágeno y proteínas clave, como la queratina.
Hay más: los estudios también han demostrado que la Niacinamida puede prevenir que el pigmento llegue a la superficie de la piel, mejorando así la hiperpigmentación (como las manchas oscuras y el melasma). Y, por último, pero no menos importante, la investigación también ha encontrado que la Niacinamida puede equilibrar la producción excesiva de sebo. Eso significa que puede tener un doble propósito, abordando tanto la fuente de los brotes como las manchas oscuras que dejan atrás.
No solo eso, sino que la Niacinamida también ofrece algo para cada tipo/preocupación de la piel. Ya sea que tu piel esté más grasosa de lo habitual o que estés lidiando con enrojecimiento, la Niacinamida puede ayudar.
¿Cómo usarla en tu rutina?
Dado que la Niacinamida es muy potente, vale la pena usarla en forma de productos que se dejen en la piel, como tónicos, sérums o cremas, que puedas usar diariamente; de esa manera, podrás aprovecharla al máximo. En TESSA, ofrecemos diferentes tipos de productos con ese ingrediente maravilloso: desde tónicos (Glow Essence), sérums (Sérum 15% Vitamina C y Sérum 10% Niacinamida) hasta cremas (Crema Antimanchas).
Lo más importante para nosotros en TESSA es que no solo su efectividad está comprobada por estudios clínicos, sino que además es apto para la piel sensible y reactiva, condición compartida por la gran mayoría de nuestras clientas.
¿Conclusión?
La Niacinamida supera las expectativas y, si aún no la has incorporado a tu rutina de cuidado de la piel, ahora es un GRAN momento para hacerlo.